Durante la Semana Santa, los fieles católicos en los 14 departamentos de El Salvador participaron con fe y fervor en las diferentes actividades religiosas que conmemoran la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
El Viernes Santo, las familias colocaron velas, arreglos florales y el tradicional manto morado en cada una de las 14 estaciones del viacrucis. Cada estación representa un momento clave en el camino de Jesús hacia el calvario, y encargarse de una de ellas se convierte en una forma de reflexión profunda sobre el sacrificio de Cristo por la humanidad.
En el occidente del país, los actos religiosos se vivieron con especial solemnidad. En Sonsonate, el municipio de Izalco destacó por la elaboración de las tradicionales alfombras “Caminos de Izalco”, que adornaron la calle principal de la parroquia Dolores, convirtiéndose en una manifestación de arte y fe colectiva.
En el oriente, los migueleños acompañaron la procesión del Santo Entierro, que rememora el traslado del cuerpo de Jesús al sepulcro. Feligreses de distintas parroquias también se prepararon para participar en la vigilia pascual.
Este domingo, la Iglesia Católica celebrará el Domingo de Resurrección, una de las festividades más importantes del calendario litúrgico, que recuerda la victoria de Jesús sobre la muerte.