La Fuerza Armada de El Salvador ha incrementado sus esfuerzos en la lucha contra las pandillas al participar en jornadas de eliminación de grafitis en el municipio de San Martín, al oriente de San Salvador. Esta iniciativa responde a las solicitudes de la comunidad local para borrar las marcas territoriales dejadas por grupos criminales, como la Mara Salvatrucha, en las paredes de las viviendas.
Miembros del Comando de Fuerzas Especiales del Ejército se desplazaron a la comunidad Los Olivos para cubrir con pintura los grafitis de pandillas, bajo el lema de que “con la guerra contra las pandillas, estos grafitis ya no tienen cabida en las comunidades”. Esta medida busca reforzar la presencia y control de las fuerzas del orden en áreas históricamente afectadas por la violencia de maras.
Además de la eliminación de grafitis, la Fuerza Armada mantiene operaciones de patrullaje en zonas montañosas para prevenir la reorganización de grupos terroristas. En enero, otro grupo de militares actuó en el caserío Colocho para borrar marcas de la pandilla 18. La estrategia incluye recorridos constantes por cantones y caseríos para localizar y capturar a pandilleros, enviando un mensaje firme de su compromiso con erradicar esta amenaza.
Para llevar a cabo estas operaciones, las Fuerzas Especiales están equipadas con vehículos todo terreno y tecnología avanzada, incluyendo drones capaces de detectar el calor corporal, lo que facilita la identificación y seguimiento de objetivos en terrenos difíciles.