El ministro de Obras Públicas, Romeo Rodríguez, aseguró recientemente que los buses del Sistema Integrado de Transporte del Área Metropolitana de San Salvador (Sitramss) no eran nuevos, como había promocionado el Gobierno del FMLN entre 2014 y 2015. Según Rodríguez, cerca de 50 unidades fueron adquiridas por el Estado, pero estas ya estaban usadas, siendo de 2006. Actualmente, las unidades están por cumplir su tiempo máximo de vida útil, que es de 20 años, lo que las hace poco rentables para su uso en el transporte público.
“El proyecto costó alrededor de $80 millones, que incluyó los buses y las paradas. Los buses no fueron inscritos a nombre del Gobierno, sino a nombre de la empresa. Actualmente, estamos llevando a cabo un proceso judicial, ya que la empresa tiene una deuda pendiente y parte de este proceso es recuperar los recursos y los buses, aunque estos ya están obsoletos”, explicó Rodríguez.
La Fiscalía General de la República presentó pruebas que evidencian que en 2015, Edwin Flores, exdirector de Tránsito del Viceministerio de Transporte, otorgó el proyecto de manera irregular a la empresa privada de Miguel Ángel Castañeda, empresario de Sipago, sin la debida aprobación de la Asamblea Legislativa.
“El dinero lo debe pagar la empresa, por eso existe un proceso judicial abierto y esperamos recuperar lo que se malversó. Los buses nunca estuvieron en condiciones óptimas”, agregó Rodríguez.