Foto: Diario El Salvador
En un esfuerzo por abordar los persistentes problemas de inundación que afectan el tránsito vehicular en el sector de La Canoa, en San Miguel, el Ministro de Obras Públicas (MOP), Romeo Rodríguez, anunció la contratación de una empresa consultora para desarrollar una propuesta integral que resuelva esta problemática en la carretera del Litoral.
El titular del MOP destacó la importancia de abordar las inundaciones en este tramo específico de la carretera del Litoral, que históricamente ha experimentado complicaciones durante la temporada de lluvias. En busca de una solución efectiva, se está llevando a cabo un diseño de ingeniería en colaboración con una empresa consultora especializada.
“Estamos haciendo actualmente un diseño de ingeniería, hemos contratado a una empresa consultora para desarrollar una propuesta que solucione la problemática que se da en el sector de La Canoa, donde sabemos que es un tramo de la (carretera del) Litoral que normalmente sufre inundaciones y complicaciones para el tránsito vehicular”, explicó el funcionario.
En el transcurso del presente año, el MOP ha implementado diversas medidas para mitigar las inundaciones, incluyendo la reconstrucción de 6.5 kilómetros de borda y un enrocado de 400 metros en la parte más vulnerable, así como la habilitación del cauce antiguo del río, que durante años estuvo azolvado.
Rodríguez subrayó la complejidad de transitar por La Canoa, especialmente durante la temporada de lluvias, y señaló que el plan integral incluye obras de infraestructura resilientes al cambio climático. Destacó que las carreteras del Litoral y Panamericana desempeñan un papel fundamental en la conectividad de toda Centroamérica, por lo que las intervenciones en zonas críticas son esenciales para mantener la movilidad regional.
Las acciones emprendidas por el MOP en La Canoa forman parte de un compromiso más amplio con el desarrollo de corredores estratégicos, como se detalla en el Plan Maestro Regional de Movilidad y Logística 2035. Con estas iniciativas, se busca no solo resolver problemas inmediatos, sino también garantizar la resistencia y la funcionalidad de las infraestructuras viales ante los desafíos del cambio climático.
